HIPERTENSIÓN ARTERIAL
HIPERTENSIÓN ARTERIAL
Información restringida.
Hipertensión arterial.
Aumento persistente de la presión en las arterias.
Uno o ambos componentes de la tensión arterial (la tensión sistólica o máxima, que nos informa de la presión
a
la salida del
corazón
y la tensión diastólica ó mínima, que nos informa de la presión en los vasos de la periferia corporal) estan aumentados.
Es una de las causas más importantes de problemas de salud en el mundo occidental.
Pronóstico.
Si se consigue un control adecuado, la hipertensión no reduce ni la duración ni la calidad de la vida.
Un mal control de la misma sí las reduce.
Complicaciones.
La hipertensión arterial es uno de los factores de riesgo más destacados en los problemas vasculares:
infarto cardiaco y fallo cardiaco congestivo.
embolia cerebral (ACV)
edema
pulmonar
.
fracaso renal.
afectación de la retina con pérdida de visión,
e
incluso ceguera.
Diagnóstico y tratamiento.
Diagnóstico.
El diagnóstico se realiza mediante la toma de la tensión arterial de forma adecuada (tres tomas en un mes, habiendo permanecido el paciente en reposo antes de
cada
toma al menos cinco minutos)
Una vez diagnosticada, se realizarán las pruebas adecuadas para descartar alguna enfermedad que la provoque mediante exploración general y análisis de
sangre
y orina.
Una vez descartada alguna causa para la misma, se deberá estudiar la afectación que
haya
podido producir antes de su diagnóstico, mediante:
radiografías de tórax.
ECG (electrocardiograma)
estudio de los vasos sanguíneos pequeños mediante el examen del fondo de ojo.
Finalmente, deben buscarse otros factores que aumentan el riesgo de complicaciones, como Diabetes mellitus o hiperlipemias (colesterol elevado)
Tratamiento.
Es
esencial
en el tratamiento:
dejar de fumar.
dejar de beber alcohol.
cambiar radicalmente de estilo de vida, evitando el estrés.
Aprender
a
tomarse la tensión y hacerlo todos los días nos puede ayudar
a
mejorar el control de la tensión. Medicación.
La medicación antihipertensiva es obligada, si las medidas generales
e
higiénico dietéticas no consiguen normalizar la tensión (lo que hacen en un gran número de casos si se realizan
a
conciencia)
No tomar medicacion antigripal, anticatarral o descongestionante sin anuencia de su médico.
Actividad.
Ejercicio moderado diario.
Dieta.
Pobre en grasas animales.
Poca sal.
Evitar el
café
y otras bebidas con cafeína.
Evitar el alcohol.
Con esta enfermedad se aconseja seguir la siguientes dietas:
Dieta pobre en sal "amplia".
Dieta pobre en sal estricta.
Prevención.
El tratamiento con éxito de alguna de las enfermedades que producen hipertensión puede evitarla.
Se debe prestar especial atención
a
las personas con historia familiar muy positiva.
El tratamiento temprano de la enferemdad evita complicaciones graves.
Causas.
En la mayoría de los casos es desconocida.
En, aproximadamente un 5 % de los casos, es secundaria
a
:
insuficiencia renal crónica.
enfermedades renales y suprarrenales.
desórdenes y tumores endocrinos.
arterioesclerosis.
enfermedades de las arterias (arteritis)
coartación (colapso) de la aorta.
Signos y síntomas.
La tensión elevada no produce, por sí misma, clínica.
Ésta viene provocada por sus complicaciones:
Mareos.
Dolor de
cabeza
.
Confusión o pérdida de sensibilidad en extremidades, por la afectación cerebral.
Tos sanguinolenta o acortamiento de la respiración, por la afectación de los pulmones.
Hemorragias nasales.
Pérdidas bruscas de visión.
Fallo de los riñones, etc. por la afectación de la circulación
a
los respectivos órganos.
Factores de riesgo.
Edad superior
a
60 años.
Obesidad.
Tabaquismo.
Estrés.
Alcoholismo.
Exceso de
café
o bebidas estimulantes (con cafeína)
Dietas grasas y / o muy saladas.
Vida sedentaria.
Historia familiar de infarto o hipertensión.
Uso de ciertos medicamentos:
píldoras anticonceptivas.
esteroides.
supresores del apetito.
descongestionantes nasales.
Niveles altos de colesterol ó de lípidos.