PARÁLISIS CEREBRAL
PARÁLISIS CEREBRAL
Información restringida.
Parálisis cerebral.
Un déficit en el funcionamiento cerebral, que provoca una parálisis.
La parálisis afecta al movimiento o postura.
Ocurre por daños causados al cerebro, antes, durante o después del parto.
No es ni progresiva ni transmisible.
Complicaciones.
Las producidas por las enfermedades oportunistas y las lesiones que sufran.
Pronóstico.
Incurable.
El déficit final es difícil de valorar hasta la pubertad.
Pueden llegar
a
llevar una vida casi normal.
Diagnóstico y tratamiento.
El diagnóstico se produce nada más nacer o
a
los pocos días, aunque hay casos descritos en los que los problemas no aparecen hasta días o semanas más tarde.
No hay tratamiento porque no es una enfermedad como tal.
La terapia, la educación y las nuevas tecnologías de aprendizaje y posturales, permiten que en muchos casos los afectos de parálisis cerebral lleven una vida casi normal.
Factores de riesgo.
Enfermedades oportunistas.
Infecciones
e
inflamaciones.
Problemas renales.
Accidentes o lesiones derivadas de su sintomatología.
Prevención.
Cuidados pre y postnatales.
Evitar causas maternas.
Atención durante el parto y postparto.
Incubadora para garantizar suficiente aporte de oxígeno en los partos tormentosos.
Signos y síntomas.
Hay tres tipos de parálisis cerebral:
La espástica, de movimientos rígidos y difíciles.
La atetoide, movimientos incontrolados
e
involuntarios.
La atáxica, falta de equilibrio y percepción de la postura.
Pueden darse combinaciones entre los tres tipos.
Causas.
Enfermedades durante el embarazo.
Parto prematuro.
Falta de oxígeno o
sangre
al bebé.
Resultado de un accidente.
Por envenenamiento por plomo (saturnismo)
Insuficiencia de aporte de oxígeno al separar la placenta.
Posición incómoda durante el parto.
Parto largo o muy corto.
Incompatibilidad por el factor Rh.
Rubeola
u
otras enfermedades durante el embarazo.
Falta de cuidados prenatales o lesiones cerebrales postparto.