ESTERILIDAD E INFERTILIDAD
ESTERILIDAD E INFERTILIDAD
Información restringida.
Miles de parejas en el mundo, desean tener un hijo /
a
propio y por diversas causas no pueden lograrlo. Sin embargo este problema que antes era irreversible con todas las consecuencias emocionales, familiares y psicológicas, ahora es totalmente factible
a
través de diversos medios de reproducción asistida.
Cuando una pareja no logra embarazarse, el primer paso es el realizar una serie de estudios para determinar la causa, ya que primero hay que descartar si la persona es estéril, es decir es incapaz de tener un embarazo o es infértil, que es cuando logran concebir un hijo /
a
pero
el embarazo no se logra y termina en aborto espontáneo o en la muerte del producto.
Esta evaluación debe hacerse tanto en la mujer como en el
hombre
, ya que el problema puede provenir en igual número de porcentaje, de alguno de los dos y en algunos casos por la coincidencia de ambos y no necesariamente de la mujer, como antes se creía.
Es necesario hacer una historia clínica detallada con antecedentes de enfermedades padecidas, sucesos traumáticos (como puede ser una violación) para después hacer una revisión cuidadosa del sistema reproductor y funcionamiento hormonal entre otros.
Entre los estudios recomendados para el
hombre
está el espermiograma, examen que consiste en analizar una muestra de líquido seminal y el conteo de espermatozoides, para conocer el tipo de defecto que puedan tener. Se realizan también, estudios hormonales, ultrasonidos y radiografías.
Para la mujer se realizan estudios hormonales, ultrasonidos o ecografías para evaluar el crecimiento y desarrollo de los ovocitos en el ovario, el cambio en el grosor y características del endometrio o las condiciones de las trompas de Falopio. Para evaluar las condiciones del útero y pelvis en general, se realizan exámenes radiológicos, y para observar los órganos sexuales internos, se realiza una laparoscopia, en el cual se introduce un tubo delgado por el
ombligo
que permite observar en forma directa los órganos pélvicos.
Otros estudios, como el ultrasonido transvaginal o la hiesteroscopía, son para detectar malformaciones congénitas o adquiridas, como la presencia de miomas, anormalidades en el grosor el endometrio por la presencia de pólipos o adherencias de la pared endometrial, conocidad como sinequias.